24-07-2016, 13:49
Dios mío, si no puedo adelgazar, haz que mis amigos engorden, que diría un húngaro.
Dios mío, si el tuerto no deja de mirar siempre al mismo, haz que se quede ciego, al menos durante la carrera. Amén.
Dios mío, si el tuerto no deja de mirar siempre al mismo, haz que se quede ciego, al menos durante la carrera. Amén.
Puede que la vida te conceda sueños si te ve dispuesto a perderla por conseguirlos (Jos Verstappen 2006)