23-06-2016, 12:10
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 23-06-2016, 12:13 por payoloco.)
Creo que la cara que se le quedó a Fernando tras la carrera, sin quitarse el casco siquiera, es la que se nos quedó a todos.
No dar crédito que después de la temporada que había hecho, que Vettel con un coche dañado y último en la 1a vuelta aún así hubiera ganado el título.
Aquella carrera tuvo momentos e imágenes que valen más que mil palabras:
- la cara de Newey, mirando una fotografía del coche con un agujero del tamaño de un balón. Estos materiales ilegales que usamos son la hostia, pensaría.
- Schumacher y los TR levantando el pie y apartándose. Toda ayuda es poca.
- Vettel nervioso, sabedor de que estos tres se van a apartar, ni se fija en que hay banderas amarillas.
- Alonso saliendo otra vez 7o (o 6, 8, 5, da igual) y otra vez haciendo podio. Llevando al Ferrari siempre más allá del límite.
Aquella temporada en especial se vio cómo es la F1. Un deporte dirigido en el que una serie de intereses son tan fuertes que determinarán el ganador de cada año, pese a todo.
Y todo esto, con la complacencia y beneplácito de los equipos, Ferrari primero, McLaren después, todos.
Creo que alonso ese invierno tuvo una crisis muy fuerte. Y creo que solo por ser un cabezota asturiano decidió seguir en Ferrari. Quería ganar a la maquinaria de la F1 con el coche rojo. Pese a todo y pese a todos. Y en 2013 se prometía una nueva lucha, pero no era plan de volver a dejar las cosas al azar de la última carrera. Mejor controlar el tema antes. Y por eso se cambiaron los neumáticos.
RB tendría así sus 4 años prometidos.
Y luego que pase el siguiente.
Es así, y no hay más. Alonso esta ahí, agazapado, por si se despistan, por si se olvidan de él y les sorprende. Pero en esta F1 es muy muy difícil escapar al control ejercido por los que manejan esto.
No dar crédito que después de la temporada que había hecho, que Vettel con un coche dañado y último en la 1a vuelta aún así hubiera ganado el título.
Aquella carrera tuvo momentos e imágenes que valen más que mil palabras:
- la cara de Newey, mirando una fotografía del coche con un agujero del tamaño de un balón. Estos materiales ilegales que usamos son la hostia, pensaría.
- Schumacher y los TR levantando el pie y apartándose. Toda ayuda es poca.
- Vettel nervioso, sabedor de que estos tres se van a apartar, ni se fija en que hay banderas amarillas.
- Alonso saliendo otra vez 7o (o 6, 8, 5, da igual) y otra vez haciendo podio. Llevando al Ferrari siempre más allá del límite.
Aquella temporada en especial se vio cómo es la F1. Un deporte dirigido en el que una serie de intereses son tan fuertes que determinarán el ganador de cada año, pese a todo.
Y todo esto, con la complacencia y beneplácito de los equipos, Ferrari primero, McLaren después, todos.
Creo que alonso ese invierno tuvo una crisis muy fuerte. Y creo que solo por ser un cabezota asturiano decidió seguir en Ferrari. Quería ganar a la maquinaria de la F1 con el coche rojo. Pese a todo y pese a todos. Y en 2013 se prometía una nueva lucha, pero no era plan de volver a dejar las cosas al azar de la última carrera. Mejor controlar el tema antes. Y por eso se cambiaron los neumáticos.
RB tendría así sus 4 años prometidos.
Y luego que pase el siguiente.
Es así, y no hay más. Alonso esta ahí, agazapado, por si se despistan, por si se olvidan de él y les sorprende. Pero en esta F1 es muy muy difícil escapar al control ejercido por los que manejan esto.
#orgulloALO
"Cuando era niño, soñaba con coches, con olor a gasolina, con viento en la cara, trofeos."
¤ Fernando Alonso ¤