31-10-2023, 16:51
Aston Martin, en busca del rumbo perdido
En el Dakar es fácil perder el rumbo. En África, cuando no había GPS y todo era a base de brújula y compás, el Dakar escribió algunas de sus más bellas historias con el rumbo. En Arabia, con las limitaciones impuestas a las nuevas tecnologías, también ocurren extravíos.
En estos casos, lo suyo en detenerse y tratar de orientarse en busca del rumbo preciso. Y si éste no aparece, quizás sea necesario deshacer el camino andado, retornar al último punto de referencia claro por el que se pasó y allí volver a empezar de nuevo el camino.
Eso es algo que sabe Fernando Alonso, que ya ha disputado un Dakar en su haber y que ha dicho claramente que en el futuro, tras la F1, quiere volver a repetir la experiencia.
Pero ahora, en el paddock de la F1, Fernando Alonso se encuentra en la misma disyuntiva. Aston Martin parece haber perdido el rumbo. Tras un inicio de temporada espectacular, a fuerza de querer avanzar para separarse de sus perseguidores e intentar acercarse a ‘la liebre’, parecen haber perdido el norte.
No me preocupa que una evolución no funcione. No me preocupa que una teórica mejora se convierta en una ‘peora’ cuando se pone en pista. Son cosas que pasan.
Lo preocupante, lo que da una idea de la profunda crisis de Aston Martin, es el hecho de que Lance Stroll y el asturiano finalmente han salido a carrera en los dos últimos GP con especificaciones diferentes. Es una señal clara de que hay una cierta confusión en el equipo, que no saben donde están.
Es cierto, Aston Martin ha vivido un año muy ocupado. Junto al hecho de encontrarse con un coche competitivo a inicios de temporada, al menos en manos de un gran campeón, ha tenido que afrontar algo temido por todos los directores de equipo: una mudanza. Y eso implica un pequeño 'impasse', una rotura de ritmo, que puede pasar factura.
“No queremos más solución que trabajar. Este temporada ya se ha acabado. En estas últimas carreras hemos tenido un bajón de prestaciones y ahora debemos concentrarnos en recuperar nuestro nivel”, señaló Fernando al finalizar el GP de México.
Alonso sabe perfectamente que el objetivo ahora no es tanto defender la posición del equipo en el campeonato de constructores como el de sentar las bases de 2024. El nuevo coche está en fase de definitiva definición y es importante saber que le sucede al actual para no repetir errores, para no seguir rumbo erróneo... ese que te lleva a un mar de dunas infranqueable.
Por eso Alonso dijo que no le importaba salir del Pit-Lane porque “podemos aprender más que si simplemente pasamos el GP”. Parece resignado a convertir los GP en ‘test’ para el 2024… algo que en cierta forma están haciendo otros equipos. “Hay que hacer tantas pruebas como sea posible, para conseguir información”, apunta Fernando.
En el Dakar es fácil perder el rumbo. En África, cuando no había GPS y todo era a base de brújula y compás, el Dakar escribió algunas de sus más bellas historias con el rumbo. En Arabia, con las limitaciones impuestas a las nuevas tecnologías, también ocurren extravíos.
En estos casos, lo suyo en detenerse y tratar de orientarse en busca del rumbo preciso. Y si éste no aparece, quizás sea necesario deshacer el camino andado, retornar al último punto de referencia claro por el que se pasó y allí volver a empezar de nuevo el camino.
Eso es algo que sabe Fernando Alonso, que ya ha disputado un Dakar en su haber y que ha dicho claramente que en el futuro, tras la F1, quiere volver a repetir la experiencia.
Pero ahora, en el paddock de la F1, Fernando Alonso se encuentra en la misma disyuntiva. Aston Martin parece haber perdido el rumbo. Tras un inicio de temporada espectacular, a fuerza de querer avanzar para separarse de sus perseguidores e intentar acercarse a ‘la liebre’, parecen haber perdido el norte.
No me preocupa que una evolución no funcione. No me preocupa que una teórica mejora se convierta en una ‘peora’ cuando se pone en pista. Son cosas que pasan.
Lo preocupante, lo que da una idea de la profunda crisis de Aston Martin, es el hecho de que Lance Stroll y el asturiano finalmente han salido a carrera en los dos últimos GP con especificaciones diferentes. Es una señal clara de que hay una cierta confusión en el equipo, que no saben donde están.
Es cierto, Aston Martin ha vivido un año muy ocupado. Junto al hecho de encontrarse con un coche competitivo a inicios de temporada, al menos en manos de un gran campeón, ha tenido que afrontar algo temido por todos los directores de equipo: una mudanza. Y eso implica un pequeño 'impasse', una rotura de ritmo, que puede pasar factura.
“No queremos más solución que trabajar. Este temporada ya se ha acabado. En estas últimas carreras hemos tenido un bajón de prestaciones y ahora debemos concentrarnos en recuperar nuestro nivel”, señaló Fernando al finalizar el GP de México.
Alonso sabe perfectamente que el objetivo ahora no es tanto defender la posición del equipo en el campeonato de constructores como el de sentar las bases de 2024. El nuevo coche está en fase de definitiva definición y es importante saber que le sucede al actual para no repetir errores, para no seguir rumbo erróneo... ese que te lleva a un mar de dunas infranqueable.
Por eso Alonso dijo que no le importaba salir del Pit-Lane porque “podemos aprender más que si simplemente pasamos el GP”. Parece resignado a convertir los GP en ‘test’ para el 2024… algo que en cierta forma están haciendo otros equipos. “Hay que hacer tantas pruebas como sea posible, para conseguir información”, apunta Fernando.
![[Imagen: tiolavara.png]](http://2.bp.blogspot.com/_kdtPzb99cBg/S7yBbEj_bHI/AAAAAAAAALA/fah_ANf2S0A/s1600/tiolavara.png)
Siempre con Fernando, año tras año.
Un imbécil que lee mucho no reduce un ápice su imbecilidad. Si acaso, se convierte en un imbécil leído.